martes, 8 de diciembre de 2015

Animación a la lectura

ANIMACIÓN A LA LECTURA

El libro que vamos a trabajar es: ¡Qué desastre de niño! de la escritora Pilar Mateos. El motivo por el cuál me he decantado por este ejemplar es que trata temas de interés para los alumnos y con los que se pueden sentir identificados. Lo ideal es que recapaciten acerca de las situaciones que se reflejan, que sean capaces de juzgarlas y que consigan llegar a una solución ante el problema que se presenta: la pérdida del protagonista de todo.

Con esta animación a la lectura se pretende que se establezca un acercamiento afectivo e intelectual al libro seleccionado, consiguiendo despertar en el lector el gusto por la lectura.





ANTES DE LEER

Estas actividades se enfocan a:
  • Conocerla información que nos aporta el libro (portada, contraportada, etc).
  • Aproximar al autor de la obra.
  • Hacer predicciones sobre el contenido y/o la forma.
  • Interesarse por el tema/as que se desarrollan en la historia. 
  • Investigar sobre algunos aspectos interesantes para la comprensión. 
  • Pre-identificarse con personajes, actitudes, situaciones...que encontrarás en la lectura.






Tras abordar el libro en cuanto a la forma que presenta, ahora presentaremos el libro más técnicamente mediante una ficha bibliográfica:

Título: ¡Qué desastre de niño!
Autora: Pilar Mateos.
Ilustrador: Federico Delicado.
Editorial: SM.
Fecha de la primera edición: febrero de 1992.
Edad en la que me baso para realizar el análisis: Primeros lectores.


Adecuación del libro a la edad del lector:

Prestando atención a la manejabilidad es buena, debido a que pesa poco y es muy ligero. La portada que presenta es de pasta blanda, y llama la atención porque presenta en primer plano al protagonista de nuestra historia.

Las ilustraciones cobran mucha importancia y se incluyen en prácticamente todas las páginas del libro, a excepción de algunas pocas. Los personajes y el entorno que se presentan son poco estereotipados. Tienen su propia identidad y el ilustrador no abusa del color para llamarla atención,  prefiere utilizar tonos sobrios.

La tipografía que se emplea tiene un alto grado de legibilidad. Se trata de un tipo de letra: Arial o Calibri, en un tamaño trece o catorce que facilita la lectura del mismo.

La temática del texto viene determinada por: las relaciones familiares (padres e hijos, abuela y nieto, hermanos) y entre grupos de iguales (amigos); la importancia de la comunicación; el enfado; la falta de incomprensión; la comparación con otra persona; el respeto hacia los demás; etc.

El protagonista del relato es Fermín, un niño como los demás, que tiene un problema: lo pierde todo (la tortuga, el jersey, el bastón de la abuela, las zapatillas de su hermano, los juguetes...) hasta tal punto que un día se queda sin voz. ¿Cómo le ha podido pasar? Las cosas se pierden solas, pero la voz no. Pese a las dificultades que se le presentan consigue recuperarla, y presta mucha más atención a todo lo que hace o tiene.

Los personajes secundarios son del entorno más cercano del protagonista,  los padres que se enfadan cada vez que pierde algo; el hermano pequeño: Pedro, con el que siempre comparan a Fermín porque es un encanto de niño; la abuela que es quien le consuela; la voz, que un día decide marcharse y el protagonista tiene que ingeniárselas para volver a recuperla; los mayores del colegio que no les dejaban jugar en el patio del colegio, y al gritarles Fermín se queda sin voz; los amigos del colegio con los que no puede comunicarse porque no puede hablar;  y el portero Felipe que se extraña de la actitud de Fermín al ir en busca de su voz.

Algunos de los valores que se aprecian son: el respeto, la amistad, la familia, la comunicación.  Mientras que como contravalores destacan: la pérdida de objetos, la falta de memoria, entre otros. En la edad comprendida entre los 7-9 años, los niños prefieren temas realistas que se desarrollen en ambientes familiares (hogar, juego, colegio) y en los que predomine el humor. Están dotados para manipular ideas y objetos, y ya interpretan hechos y palabras. Usan el símbolo de modo lógico y llegan a generalizaciones.

Por ultimo, el lenguaje es adecuado, ya que cuenta con un vocabulario apto para la edad a la que va destinada. Las oraciones son simples y compuestas (subordinadas y coordinadas). Se incluyen distintos diálogos entre los personajes para hacer más amena la lectura, acompañados de diminutivos, exclamaciones, pregunta,  juegos de palabras, una adivinanza y otras figuras literarias.



DURANTE LA LECTURA

Puesto que el libro que vamos a leer cuenta con cincuenta y nueve páginas y carece de capítulos, vamos a leer dos páginas para cada martes y para cada viernes, de tal forma, que en total serán cuatro a la semana. Trabajaremos con este libro durante aproximadamente quince semanas.

La lectura tiene que ser individual,  personal y silenciosa.

La manera de abordar el contenido implícito del texto es mediante una serie de actividades,  que se irán explicando una por una a continuación. Se trata de que el alumno recuerde, infiera, interprete, reflexione, relacione, profundice, argumente, imite y comporta diferentes aspectos referentes al contenido y a la forma del libro.








DESPUÉS DE LA LECTURA

En este apartado se trabajará la memoria, tanto a medio como a largo plazo, en relación con la lectura para:
  • Realizar síntesis globales e individuales.
  • Sacar conclusiones acerca de lo que se ha leído e interpretado.
  • Relacionar personajes, acciones, causas, consecuencias...
  • Interpretar hechos, situaciones, actuaciones, etc.
  • Poder hacer valoraciones (objetivas y subjetivas).








CONCLUSIÓN

Tras la realización de las actividades propuestas anteriormente, se pretende que los alumnos se interesen por la lectura, y no la abandonen con el paso de los años. Y así, generar a largo plazo un hábito lector.

No consiste en someter a los niños a un test o a un examen para comprobar que se lo han leído porque sino meramente lo leerán por ese motivo, o incluso ni lo harán. Va más allá, tienen que: disfrutar con las historias que se narran, simpatizar con los personajes y las situaciones que se presentan, aportar ideas o vivencias similares, ser críticos, entender los distintos puntos de vista que puede haber, tener la libertad para decir si les ha gustado el libro seleccionado por el maestro/a o no...

Pese a que esta animación a la lectura se aplica únicamente al libro con el que hemos trabajado "¡Qué desastre de niño!". Lo ideal es poder hacer uso de la biblioteca de aula y contar con ejemplares actuales y poder abordarlos de la misma forma, e incluso generando muchas más actividades dinámicas e interesantes.

Por ello, hacer de la lectura algo divertido está en manos de los profesores.





Documentación consultada:
- Apuntes del bloque 1 y 4.
- Documento que recoge los ejemplos de actividades de animación a la lectura.
http://lupadelcuento.org/portadas/smlit253.jpg